Si tienes planeado visitar el famoso Castillo de Neuschwanstein o recorrer la Ruta Romántica de Baviera, y te preguntas qué ver en Füssen en un día, aquí encontrarás toda la inspiración que necesitas. Este mágico pueblo, conserva un casco antiguo medieval que te transportará en el tiempo. Entre sus rincones más pintorescos, descubrirás plazas acogedoras y edificios históricos, como el Monasterio Benedictino de San Mang y el Castillo Alto.
Füssen no solo ofrece el encanto de su centro histórico, sino también la belleza de sus alrededores. Situada en pleno corazón de los Alpes Bávaros, aquí encontrarás montañas, lagos cristalinos y paisajes que invitan a desconectar y disfrutar de la tranquilidad de Baviera.
Continúa leyendo para descubrir todos los lugares que ver en Füssen en un día y en sus alrededores, así como consejos sobre dónde comer, dormir o aparcar, para que puedas disfrutar de una visita inolvidable. Como siempre, tienes un mapa al final del artículo con todos los puntos de interés.
Índice de contenidos
Cómo llegar a Füssen
Füssen es una ciudad al sur de Alemania, en la región de Baviera, que puedes alcanzar fácilmente por carretera o tren desde Múnich, en Alemania, o Innsbruck, en Austria, las dos ciudades cercanas con aeropuertos.
✈️ Desde Múnich
🚗 En coche (159 km): aproximadamente 1 hora y 45 minutos.
🚆En tren: trayecto directo de 2 horas.
✈️ Desde Innsbruck
🚗 En coche (107 km): aproximadamente 1 hora 35 minutos.
🚆En transporte público: no hay conexión directa. Si planeas visitar Múnich, puedes tomar un tren de Innsbruck a Múnich (1 hora y 45 minutos) y desde allí desplazarte a Füssen.
Puedes consultar los horarios de los trenes en la página de Deutsche Bahn.
¿Prefieres una visita guiada desde Múnich?
Si no dispones de mucho tiempo y te apetece visitar el castillo con guía en español, puedes reservar esta excursión al Castillo de Neuschwanstein y al Palacio de Linderhof desde Munich.
Aparcamiento en Füssen
Si viajas en coche a Füssen, tendrás que recurrir a un parking de pago, salvo que te alojes en un hotel con estacionamiento incluido (en el epígrafe Dónde dormir en Füssen te recomiendo uno con esta opción).
Tras revisar varias opiniones en Google Maps, nosotros elegimos aparcar en Kemptener Strasse, donde hay dos alternativas:
- Un primer aparcamiento, más cercano al centro, con una tarifa de 1,5 €/hora y un límite de 2 horas.
- Un segundo aparcamiento, justo al lado, con un coste de 2 €/hora y sin límite de tiempo. Ojo, este parking cobra por cada inicio de hora, por lo que si estacionas una hora y un minuto, pagarás 4 €.
Ambos están muy bien ubicados, ya que incluso el más alejado queda a apenas 400 metros de Stadtbrunnen, la plaza que puede considerarse como el corazón de Füssen. Puedes ver la ubicación exacta de ambos en el mapa que encontrarás al final del artículo.
Qué ver en Füssen y alrededores
Si has llegado hasta aquí buscando información sobre Füssen, es probable que estés planeando visitar el Castillo de Neuschwanstein y quieras complementar tu excursión. Si no es así, déjame convencerte: no te pierdas este castillo de cuento, inspiración para el famoso Castillo de la Bella Durmiente de Disney.

Füssen es la combinación perfecta para completar tu visita al Castillo de Neuschwanstein. Es una ciudad pequeña, ideal para recorrer en media jornada. Mi recomendación es que, si cuentas con un día completo, empieces tu itinerario temprano visitando el castillo. Esto te permitirá regresar a Füssen a la hora del almuerzo.
Nosotros comimos en La Perla, un restaurante italiano donde la comida estaba muy buena y la atención fue súper amable. Pedimos tres platos principales y una cerveza (nos ofrecieron una jarra de agua gratuita), y todo nos costó 58 €.
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Por la tarde, tendrás tiempo suficiente para explorar Füssen, ya que recorrer su centro histórico no lleva más de 2 o 3 horas, tiempo que se puede aumentar si decides visitar el interior de los monumentos principales. Si este es el caso, ten en cuenta que tanto el interior del castillo como el Museo de la Ciudad de Füssen cierran temprano: a las 16 h en invierno y a las 17 h en verano. Si planeas incluirlos en tu recorrido, empieza por ellos.
Casco antiguo de Füssen
Situado a orillas del río Lech, este encantador pueblo bávaro destaca por su casco antiguo de calles empedradas y coloridas fachadas barrocas y renacentistas. Muchas de estas fachadas están decoradas con frescos o inscripciones que reflejan los antiguos oficios de sus propietarios.

Una de las calles más bonitas es Reichenstrasse, el eje comercial de Füssen. Esta calle formaba parte de la Vía Claudia Augusta, la antigua calzada romana que cruzaba los Alpes y conectaba el norte de Italia con el alto Danubio, finalizando en Donauwörth, otra de las ciudades de la Ruta Romántica de Baviera.
En Reichenstrasse no puedes perderte la Stadt-Apotheke, una antigua farmacia con una fachada pintada espectacular. Cuando nosotros la visitamos, las luces navideñas ya empezaban a decorar la ciudad, luciendo aún más bonita.

Füssen fue la única ciudad de la Ruta Romántica que visitamos cuyo mercado navideño todavía no había abierto, ya que solo lo hacía durante dos fines de semana en diciembre.
Al final de Reichenstrasse llegarás a uno de los lugares más emblemáticos de Füssen: la Stadtbrunnen. Esta fuente está rodeada de casas de vivos colores y, al fondo, destaca el castillo, creando la típica imagen de postal de la ciudad que puedes ver en la portada de este artículo.

Muy cerca de allí se encuentra otra preciosa fuente, la Mädchenbrunnen o Fuente de las Niñas, donde es habitual ver las esculturas decoradas con sombreros o prendas de abrigo.

Otra zona que merece la pena recorrer son las calles Schrannengasse y Brunnengasse. La segunda te lleva al Brotmarkt, una pintoresca plaza cuyo nombre significa Mercado del Pan. Allí encontrarás la estatua de Kaspar Tieffenbrucker, más conocido como Gasparo Duiffopruggar, un famoso luthier originario de Füssen, considerado por algunos como el creador del violín en su forma moderna. Füssen fue, de hecho, uno de los primeros y principales centros europeos de fabricación de laudes y violines. Ya en el siglo XVI, se fundó aquí el primer gremio de fabricantes de laudes.

En definitiva, lo mejor que puedes hacer en Füssen es perderte por su casco antiguo, disfrutar de sus tiendas de artesanía y disfrutar de una deliciosa tarta en alguna de sus coquetas cafeterías.
Monasterio Benedictino de San Mang
Este monasterio dedicado a San Magnus, patrón de Füssen, fue fundado en el siglo VIII y reconstruido en el siglo XVIII en estilo barroco, tras haber sido destruido durante la Guerra de los Treinta Años.

Su iglesia barroca es especialmente valiosa, ya que alberga el fresco más antiguo de Baviera, datado en el año 980. Sin embargo, lo que me llamó mucho la atención es su preciosa torre, que se remonta al año 1200.

En el interior, además del fresco original del siglo X, destacan el altar mayor, el órgano, la sillería del coro tallada y la cripta. La iglesia está abierta para visitas todos los días de 8:00 a 19:00 h y la entrada es gratuita.
Museo de la ciudad de Füssen
En este museo, localizado en el interior del monasterio, encontrarás diferentes obras de arte, destacando la exposición dedicada a la fabricación del laúd y el violín, con una colección valiosa de instrumentos de diferentes épocas. Además, se pueden ver las estancias del monasterio de estilo barroco, adornadas con maravillosos frescos, y acceder a la Capilla de Santa Anna, en la que se exponen un ciclo de pinturas de gran valor, la Danza de la Muerte.
🕒Horario: 13:00 – 16:00 de viernes a domingo (noviembre – marzo); 11:00 – 17:00 de martes a domingo (abril – octubre).
💰 Precio: 6 €. Entrada combinada museos de la ciudad: 9 €.
Puedes consultar más información sobre el Monasterio de Mang y el Museo de la ciudad en la página oficial de Füssen.
Castillo Alto
Este castillo que, como su propio nombre indica, se encuentra en la zona más elevada de la ciudad, era la residencia de los obispos de Augsburgo. Actualmente, alberga una pinacoteca en la Sala de los Caballeros, una estancia en la que te sorprenderá por su espectacular techo de madera.

Aunque lo más singular del castillo son las pinturas que adornan las fachadas del patio, que te harán creer que estás observando ventanas y miradores en una pared que, en realidad, es totalmente lisa. El acceso al patio es totalmente libre, por lo que te recomiendo que te acerques a verlo aunque no tengas intención de entrar en la pinacoteca.
Si quieres más información sobre el interior del castillo, puedes consultar su página oficial.
🕒Horario: 13:00 – 16:00 de viernes a domingo (noviembre – marzo); 11:00 – 17:00 de martes a domingo (abril – octubre).
💰 Precio: 6 €. Entrada combinada museos de la ciudad: 9 €.
Iglesia del Espíritu Santo
La Heilig-Geist-Spitalkirche es una pequeña iglesia gótica que te llamará la atención por su colorida fachada rojiza decorada con frescos. En su pequeño interior, destacan los altares de mármol y los frescos de los techos.
💰 Precio: gratis.
Lechfall
Una de las visitas imprescindibles qué ver en Füssen en un día es la cascada Lechfall, a la que puedes llegar a través de un agradable paseo, de unos 20 minutos desde la ciudad, a la orilla del río Lech. Si lo prefieres, puedes llegar en coche y dejarlo en un aparcamiento gratuito, pero es pequeño, por lo que es complicado encontrar sitio.
El paisaje que rodea a la cascada es espectacular y el color del agua, en ocasiones, es de un azul turquesa alucinante. Sin embargo, esto depende de la luz y de la cantidad del agua que lleve, así que no siempre se puede tener la suerte de verla así. No obstante, su entorno bien vale la pena.
Aunque la Tarjeta Sanitaria Europea cubre la atención médica básica, algunos gastos como ciertos medicamentos pueden no estar completamente cubiertos. Te recomiendo viajar con un buen seguro de viajes, que te protege además frente a imprevistos como la pérdida de equipaje o la repatriación. Yo siempre confío en Heymondo, porque ofrece una cobertura excelente y atención 24/7 en español desde su app, con opción de videollamadas para consultas médicas.
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Dónde dormir en Füssen
Si estás planeando visitar Füssen y el Castillo de Neuschwanstein, te recomiendo pasar al menos una noche en la ciudad o en sus alrededores para aprovechar al máximo la visita.
Nosotros decidimos alojarnos en la Pizzería Taormina, en Roßhaupten, a solo 12 km de Füssen. Aunque es un alojamiento sencillo, lo elegimos por ser más económico que otras opciones en Füssen y por las excelentes reseñas tanto de su desayuno como de su restaurante. La experiencia no nos decepcionó: el desayuno era muy completo y las pizzas al horno de leña estaban buenísimas. Además, cenar allí fue muy barato: 38 € para tres personas.

Si prefieres alojarte en Füssen o sus alrededores, aquí tienes una selección de las mejores opciones para tu estancia.
Alojamientos recomendados en Füssen y alrededores
Lucky Home Spitzweg Apartment €€ (9,6/10): Apartamento muy bien valorado en la calle principal de Füssen. Cuenta con cocina, espacio para tres personas, y ofrece parking y cancelación gratuitos.
Hotel Sonne €€ (8,9/10): Hotel de cuatro estrellas en pleno centro de Füssen, con habitaciones modernas y cómodas. Incluye desayuno, parking y cancelación gratuita. También dispone de restaurante.
Hotel Ludwigs € (8,4/10): Alojamiento económico situado en pleno centro de Füssen. Tiene opción de desayuno y parking privado por un suplemento, además de dos restaurantes.
Alojamientos cercanos a Füssen en plena naturaleza
Villa Ludwig Suite Hotel €€€ (9,4/10): Hotel elegante con spa en Hohenschwangau, justo al lado del Castillo de Neuschwanstein y con vistas a este. Todas las estancias incluyen desayuno, acceso al spa y cancelación gratuita.
Landhaus Kössel €€ (8,8/10): precioso alojamiento junto al lago Hopfensee, a 5 minutos de Füssen. Dispone de habitaciones, apartamentos y chalets, todos con acceso gratuito al spa. Ofrece cancelación gratuita y desayuno opcional.
Si estás planificando una ruta por el sur de Alemania, en nuestra Guía de Baviera encontrarás un itinerario de 7 días, consejos prácticos para organizar tu viaje e información sobre los principales mercadillos navideños.



