Qué ver en Rijeka, la gran desconocida de Croacia

Si estás organizando una ruta por el norte de Croacia y la península de Istria, ya sea que vengas desde Split o desde Zagreb, Rijeka quedará en tu camino. ¿Rijeka merece la pena? Esta ciudad, la tercera más grande del país y el principal puerto de Croacia, suele pasar desapercibida en muchos itinerarios, pero creemos que bien merece una visita. No encontrarás grandes monumentos que ver en Rijeka, pero, como antiguo puerto clave de la monarquía austrohúngara, conserva un aire imperial con palacios elegantes y rincones llenos de encanto que nos sorprendieron muy gratamente.

Medio día es suficiente para descubrir lo esencial, así que Rijeka puede ser una parada perfecta para combinar con ciudades como Zadar, en una ruta entre Split y la península de Istria. Desde su puerto salen ferrys a islas como Rab, Pag o Cres, y está conectada por un puente con la isla de Krk, por lo que, si tienes pensado visitar alguna de ellas, también puede ser una excelente opción para aprovechar el trayecto.

Sigue leyendo y descubre qué ver en Rijeka, cómo organizamos nuestra visita y todo lo que necesitas saber para incluir esta ciudad en tu ruta, con un itinerario práctico y un mapa al final del artículo.

Dónde aparcar en Rijeka

Si, como nosotros, no dispones de mucho tiempo para visitar Rijeka, te recomendamos aparcar en el Garaje Ciottina. Tiene un precio económico y una ubicación ideal para comenzar el recorrido por el centro de la ciudad. La tarifa es de 1 € por hora, y se reduce a 0,5 € por hora desde las 18:00 hasta las 7:00.

Antes de dejar el vehículo en este parking para comenzar la visita a pie, aprovechamos para acercarnos primero al Castillo de Trsat, que sin duda es uno de los lugares imprescindibles que ver en Rijeka.

Qué ver en Rijeka

Rijeka se recorre fácilmente a pie y medio día es suficiente para ver lo más interesante. A continuación te dejo una ruta optimizada para que no te pierdas ninguno de sus lugares imprescindibles, desde elegantes palacios hasta túneles secretos y plazas con mucho ambiente.

Castillo de Trsat, el lugar más bonito que ver en Rijeka

Esta ciudadela fortificada, construida a finales del siglo XIII, se alza sobre una colina a 138 metros de altura. Hay constancia de que ya en época prehistórica existía aquí una torre de vigilancia, y más tarde fue un importante bastión romano gracias a su posición estratégica.

Aunque no hay mucho más que ver que lo que se aprecia en la foto, es un lugar bonito —aunque bastante restaurado—, y las vistas de Rijeka y del mar Adriático son espectaculares. Además, la entrada es gratuita. Se puede subir al torreón y hay una pequeña sala donde se organizan exposiciones temporales.

Es posible llegar a pie desde el centro de la ciudad, pero tendrás que enfrentarte a más de 500 escalones. Nosotros preferimos ir en coche y no tuvimos problemas para aparcar en los alrededores. En la explanada de la fortaleza hay un bar con terraza: seguro que una cerveza bien fresquita con esas vistas sabe a gloria, especialmente si has subido andando. Nosotros fuimos a primera hora de la tarde y lo encontramos cerrado.

🕒 Horario: todos los días de 9:00 a 00:00.

💰 Precio: gratis.

Centro histórico de Rijeka

Te proponemos un recorrido por Rijeka de unos 3 kilómetros, comenzando por la zona más moderna de la ciudad. Esta parte está repleta de edificios y palacios del siglo XIX, cuya arquitectura nos recuerda mucho a ciudades como Trieste, con un estilo claramente influenciado por los países centroeuropeos. No es casualidad: Rijeka formó parte del Imperio austrohúngaro durante más de cuatro siglos.

La segunda parte del itinerario transcurre por la Old Town o Ciudad Vieja, donde todavía se conservan ruinas romanas y otras construcciones de época medieval y de los siglos XVI y XVII, como la emblemática Torre del Reloj.

Iglesia de Nuestra Señora de Lourdes de los Capuchinos

Nada más salir del parking, nos encontramos con un impresionante edificio de ladrillo rojo y blanco. Se trata de la Iglesia de Nuestra Señora de Lourdes de los Capuchinos, construida a principios del siglo XX en estilo neogótico.

La iglesia se encuentra en una de las plazas principales de Rijeka, junto al Palacio Ploech, y su interior es bastante sencillo. Lástima que nosotros pillamos esta zona en obras, lo que le quitaba algo de encanto.

Palacio Ploech

El Palacio Ploech es uno de los edificios más reconocidos de Rijeka. Fue mandado construir por Aniballe Ploech en 1888, uno de los cuatro inventores del torpedo.

Gracias a la fábrica de torpedos de Rijeka, la ciudad ganó reputación internacional y vivió una etapa de importante industrialización y desarrollo urbanístico. Fueron los propios impulsores de esta industria quienes invirtieron en la construcción de bellos palacios municipales, como este.

Plaza Jadranski

Esta es una de las plazas más importantes de Rijeka, desde la cual comienza la calle principal de la ciudad: la calle Korzo. En ella destaca el monumental Palacio Adria, una de las construcciones más imponentes del centro.

Palacio Adria

Este edificio fue mandado construir en 1895 por la Asociación de Barcos de Vapor Adria y, hoy en día, es la sede de Jadrolinija, la principal compañía naviera de Croacia. Sus fachadas, de estilo renacentista, cuentan con bellos portales barrocos con columnas, rematadas con esculturas.

El palacio tiene dos fachadas: una da a la Plaza Jadranski y la otra al paseo marítimo. Las esculturas de la fachada que mira al mar representan símbolos marinos, mientras que las que dan a la plaza están relacionadas con los continentes con los que la compañía mantenía conexiones comerciales.

Calle Korzo

La calle Korzo es la arteria principal de Rijeka, llena de vida a cualquier hora del día. Es el lugar con más ambiente de la ciudad, ideal para pasear, ir de compras o sentarse en alguna terraza.

En esta calle destacan dos edificios por encima del resto: la Torre del Reloj y el Palacio Modelo.

Torre del reloj, el símbolo de Rijeka

La Torre del Reloj de Rijeka, conocida también como Torre Municipal, es uno de los grandes símbolos de la ciudad. Antiguamente, era la puerta de entrada a la ciudad fortificada y, hoy en día, marca el acceso a la Ciudad Vieja.

Aunque fue construida en la Edad Media, algunas partes son posteriores. El reloj actual data del siglo XVII y, justo debajo, se puede ver el escudo de armas de Rijeka, representado por un águila bicéfala.

Palacio Modello

Este palacio fue construido en 1882 con el objetivo de dotar a la ciudad de un edificio municipal monumental, digno del prestigio de un gran puerto. Se inspiraron en otras ciudades como Trieste, con la que Rijeka competía constantemente por convertirse en el principal puerto del Adriático.

Casa Turca

La Casa Turca llama la atención por su fachada de estilo árabe, herencia de su pasado como consulado turco y griego. Es uno de los edificios más singulares del centro de Rijeka.

Justo al lado se encuentra el Mercado Municipal, un edificio verde muy fotogénico, donde también puedes entrar para echar un vistazo a los productos frescos que se venden cada día.

Teatro Nacional de Croacia

El Teatro Nacional de Croacia destaca por su elegante combinación de estilos, con un exterior neorrenacentista y un interior neobarroco.

El techo del auditorio está decorado con pinturas de Franz Matsch, Ernst Klimt y su hermano, el célebre Gustav Klimt.

Canal Muerto

El Canal Muerto, que aparece en la foto de portada de este artículo, es la antigua desembocadura del río Rječina, antes de que su curso fuera desviado por las continuas inundaciones. Hoy en día, esta zona funciona como puerto para embarcaciones pequeñas y, en nuestra opinión, es uno de los rincones más bonitos que ver en Rijeka.

Plaza Ivana Koblera

Al atravesar la Torre del Reloj, llegamos a una de las plazas con más historia de Rijeka. En época medieval, era el principal punto de reunión de los habitantes y albergaba el antiguo Ayuntamiento.

Hoy es una zona con mucho ambiente, llena de terrazas, perfecta para hacer una pausa durante el recorrido.

Arco romano y asentamiento romano de Tarsatica

Tarsatica fue el nombre que los celtas dieron a la ciudad cuando la fundaron, antes de pasar a manos de los romanos. Hoy aún pueden verse restos arqueológicos de aquel asentamiento, justo después de cruzar el arco romano, que ha llegado hasta nuestros días como uno de los vestigios más antiguos de Rijeka.

Catedral de San Vito

La Catedral de San Vito, dedicada al patrón de la ciudad, comenzó a construirse en 1638 por iniciativa de los jesuitas, quienes se inspiraron en la iglesia veneciana de Santa Maria della Salute. El resultado es un templo único en Croacia, al ser la única iglesia barroca de planta circular y proporciones monumentales del país.

🕒 Horario: lunes a viernes de 10:00 a 16:00. Fines de semana de 9:00 a 12:00.

💰 Precio: gratis.

Tunel de Rijeka

Este túnel de 330 metros, cuya entrada se encuentra junto a la Catedral, fue excavado entre 1939 y 1942 para proteger a la población de los bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial.

En los años previos, ya se empezaron a construir otros túneles militares que servían como almacenes de armas y búnkeres, preparados para defenderse ante la inminente amenaza de invasión, en una zona donde los cambios de frontera eran continuos.

Por desgracia, nosotros lo encontramos cerrado, a pesar de haber ido dentro del horario de apertura que figura en su web oficial.

Torre inclinada

La Torre inclinada es el campanario de la Iglesia de la Asunción de la Santísima Virgen María, aunque no está integrado en su estructura, sino construido justo al lado. La inclinación —de más de 40 centímetros— se debe a que sus cimientos se levantaron sobre fuertes corrientes subterráneas, lo que ha provocado este curioso efecto con el paso del tiempo.

Para concluir nuestro paseo por Rijeka, regresamos al aparcamiento dando un paseo por la Riva, el animado puerto de la ciudad.

Dónde dormir en Rijeka

En nuestro caso, visitamos Rijeka de camino a la península de Istria y nos alojamos en Rovinj, mi ciudad favorita de la región. Si estás pensando en hacer lo mismo, en este artículo sobre Rovinj encontrarás varios alojamientos recomendados para disfrutar de Istria.

Pero si prefieres dormir en Rijeka, aquí tienes una selección de alojamientos con excelente relación calidad-precio, ideales para una noche en la ciudad antes de seguir tu ruta.